Tener un hogar protegido a la vez que luminoso es algo que solo se puede conseguir instalando unas buenas ventanas en el hogar, algo que tarde o temprano hay que hacer en la reforma de una vivienda debido al envejecimiento de las que tiene, porque se hayan vuelto anticuadas o porque estén averiadas o estropeadas por algún punto en concreto.

Tomar la decisión de cambiar las ventanas no es algo que deba tomarse de la noche a la mañana, y es que es una decisión que debe ser meditada y analizada para tener en cuenta la multitud de opciones de ventanas que existen en el mercado a día de hoy.

 

 

¿Quieres cambiar las ventanas? Estos son los principales consejos

A la hora de elegir una ventana para cambiar las ventanas por las que se tengan en el hogar resulta interesante analizar las nueva ventanas desde diferentes puntos de vista, sobre todo teniendo en cuenta características técnicas o de materiales. Algunos de los consejos que debes tener en cuenta para acertar con la compra de tu nueva ventana son los que se muestran a continuación:

 

 Persianas

Las persianas son elementos que se usan principalmente en países mediterráneos como el nuestro, y es que por ejemplo en Estados Unidos o el norte de Europa las persianas no existen en la gran mayoría de los hogares a pesar de que tienen épocas en el año con muchas horas de luz al día.

En España siempre ha existido una gran tradición sobre la colocación de persianas, pero en la actualidad son muchos los que están prescindiendo de este elemento en sus viviendas. Recomendamos la instalación de persianas con la nueva ventana en caso de que se necesite de forma frecuente crear un ambiente oscuro en la estancia en la que se va a instalar la nueva ventana. También en aquellas ventanas de plantas bajas de edificio que deseen contar con un elemento extra de seguridad como son las persianas, que evitan el daño de posibles pedradas e incluso intentos de robo.

 

Material de la ventana

Las ventanas se han convertido en un objeto decorativo de primer nivel en las viviendas y por ello se pueden encontrar ventanas fabricadas en multitud de materiales diferentes, siendo los más comunes la madera, el PVC y el aluminio. Cada uno de ellos cuenta con unas prestaciones y características propias que son recomendables o no en función de la tipología de la vivienda o del efecto que se desee conseguir.

Las ventanas de madera tienen un escaso poder aislante y se usan principalmente en aquellos espacios del hogar en lo que lo estético y lo decorativo priman sobre lo funcional. Las ventanas de aluminio tampoco son muy resistentes térmicamente, pero cuentan con una excelente relación calidad-precio y se instalan con gran facilidad y rapidez. Las ventanas fabricadas en PVC son perfectas para los hogares en zonas más frías por su alta resistencia térmica y porque requieren un escaso mantenimiento.

 

Tipo de vidrio

El vidrio de la ventana es otro de los elementos sobre el que debemos tomar una decisión a la hora de configurar la ventana que se desea. Principalmente se debe decidir si se opta por un vidrio convencional de una única capa o si se opta por comprar una ventana con un vidrio doble.

En función del tipo de vidrio que se elija se disfrutará de diferentes niveles de aislamiento térmico, acústico y de seguridad. Y es que un doble acristalamiento permite mantener de mejor manera el calor de la vivienda en invierno y el frescor en verano, ayuda a reducir el ruido procedente del exterior y sobre todo son más seguros. Como inconveniente su precio es mayor, pero realmente merece la pena de instalarlo especialmente en hogares en zonas cálidas, concurridas por el tráfico o donde exista un mayor riesgo de robo.

En cualquier caso, podemos comprar una ventana con acristalamiento común si no son necesario menores niveles acústicos o el aislamiento térmico por vivir en una zona tranquila y de clima agradable la mayor parte del año.

 

Apertura de la ventana

A día de hoy es posible elegir entre diferentes cierres a la hora de adquirir una ventana para el hogar, desde los más herméticos a los más normales. Esto permite configurar diferentes opciones de bienestar o disminuir la energía que se consume en el hogar con la calefacción o el aire acondicionado.

Podemos elegir entre ventanas con cierre batiente o ventanas correderas. Las primeras son perfectas para lograr un mayor aislamiento respecto al exterior al proporcionar un cierre más hermético mientras que las segundas se recomiendan para cerramientos de acceso al jardín o una terraza exterior en forma de ventana corredera elevable.

Siguiendo estos consejos podremos elegir la mejor ventana posible para estancia del hogar, y es que es un elemento de gran importancia sobre el que hay que tener en cuenta múltiples aspectos.